Al principio de la Humanidad, cuando Dios creó el cuerpo humano, los órganos vitales del mismo comenzaron a discutir sobre quién sería el jefe.
El cerebro expuso: "Yo debo ser el jefe, ya que ordeno el funcionamiento de todos ustedes."
Los ojos argumentaron: "Nosotros deberíamos ser los jefes porque guiamos el cuerpo."
El corazón dijo: "Entonces yo debería ser el jefe, porque llevo la sangre para que todos funcionéis."
"En ese caso", dijo el estómago, "yo seré el jefe puesto que os alimento a todos."
Las piernas se declararon jefes porque según ellas transportan todo el cuerpo.
Y todos los demás se indignaron, por la cuenta que les traía.
Cuando la mierda pidió ser jefe, se rieron a carcajadas.
La mierda solo dijo: "Yo seré el jefe..." y se negó a salir durante cinco días.
El cuerpo estallaba.
El estómago se sentía mal.
Los ojos se nublaban.
El corazón amenazaba con pararse.
Las piernas temblaban.
Entonces todos gritaron: "¡¡QUE LA MIERDA SEA EL JEFE!!"
Y desde entonces... cualquier mierda puede ser tu puto jefe.
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