Lo lleva el hombre por delante,
lo saca con mucho recelo,
tiene cabeza y en ella no hay pelo.
El reloj de bolsillo.
En las manos de las damas a veces estoy metido
unas veces estirado y otras veces encogido.
El abanico.
Te extiendo y te abro, no cabe duda
que te hundo una cuarta de carne cruda.
El calcetín.
Señoras y señoritas,
casadas y solteritas,
se las meten estiradas
y las sacan arrugaditas.
Las medias.
Entra seco y oliendo a goma,
sale mojado y oliendo a pescado.
El buzo.
Tiene pelos por fuera,
está húmedo por dentro,
empieza por "c"
y acaba por "o".
El coco.
Es duro y redondo
y se mete hasta el fondo.
El anillo.
Entra seca y arrogante
y sale fofa y chorreante.
La galleta.
Larga y afilada cual estilete,
por la punta saca y mete
y por detrás lleva el ojete.
La aguja.
Grande y blanca la quisiera
que entre las piernas no me cupiera.
La yegua.
Cimbel matutino
con forma de pepino
que por delante escupe gotas
y por detrás le cuelgan dos pelotas
¡Esto es una polla como una olla!
No hay comentarios:
Publicar un comentario